La Asociación de Vecinos de Alcornocal
"La Columna" con el patrocinio y colaboración del Ayuntamiento de
Fuente Obejuna a través de su Área de Cultura y la Diputación de Córdoba han
apostado fuerte por la celebración de la Fiesta de la Matanza del Cerdo que
cumple este año su décima edición.
La gélida mañana del sábado 7 de noviembre, la
Banda Municipal de Música anunciaba con su diana floreal una jornada festiva en
la pedanía mellariense.
Una vez inaugurado el evento por parte de las
autoridades municipales, el presidente y miembros de la asociación y tras la
degustación de anís y dulces para todos los presentes, los matanceros se
dispusieron al sacrificio del cerdo en la mesa de matanza.
El ambiente familiar y festivo que se vive y se
convoca en muchos hogares rurales por estas fechas durante la matanza del cerdo
se vivía en la pedanía mellariense, con la diferencia de que la familia era
mucho más numerosa, la componían todo el pueblo de Alcornocal y visitantes y
curiosos de otras localidades cercanas y no tan próximas, desplazándose a la
misma incluso una señora de Sevilla atraída por esta actividad ya extinta en
muchos lugares de nuestra geografía.
Churrascado, raspado y sacado del cerdo el
vientre y todos sus órganos, corazón, hígado, riñones, intestino, etc, se
despieza el animal sacrificado en la mesa de matanza utilizando baños, artesas
y artesuelas de distintos tamaños para seleccionar en ellos el magro, el
tocino, la asadura y demás partes del cerdo por separado, procurando siempre
sacar todas las piezas enteras, fundamentalmente los solomillos, lomos y
jamones.
Las protagonistas en el siguiente paso fueron
las mujeres quienes ataviadas a la usanza para el evento picaron, sazonaron con
sal y aliñaron con especies la carne para proceder al embutido de chorizos y
morcillas utilizando cebollas, troceadas y cocidas de antemano y añadieron al lebrillo
morcillero la sangre, la manteca, el arroz, la calabaza y las especies (clavo
molido, pimienta negra molida y canela), pudiéndole poner además pimentón,
piñones y sal.
Los asistentes disfrutaron en primera persona
de todo el proceso embutiendo sus propios chorizos y morcillas a través de
talleres llevándoselos posteriormente a sus respectivas casas.
También hubo tiempo para la degustación de
pancetas y chuletas de cerdo a la lumbre y de migas con todos sus condimentos.
En total han sido 24 las empresas que
expusieron por primera vez sus productos en el mercado habilitado con carpas
para el evento, todos ellos artesanales embutidos, quesos, especies, cremas y
productos de belleza naturales para la mujer, vinos dulces y de pitarra,
artículos de platería, diademas, colgantes, frutos secos, barquillos, bollería,
artículos de cuero como pulseras, collares, etc.
Una zona dedicada a los niños con juegos
tradicionales fue otro de los atractivos de esta edición de la matanza cargada
de actividades el presente año.
No faltó en esta fiesta la cetrería de
CETRECOR, con aves rapaces y carroñeras como águilas, halcones, búhos, cuervos
y entre ellos la mascota de la empresa, una simpática y colorida guacamayo
llamada Carla. Durante la tarde se realizaron demostraciones de vuelos de estas
aves, concretamente con tres águilas y un halcón que cazó su presa mediante la
técnica del dron.
Beatriz Zafra cantó coplas entre el público
que abarrotaba la carpa instalada por el Ayuntamiento de Fuente Obejuna con
cuatro cañones de calor y con televisión incluida proporcionada por la familia
Núñez, quien llevó el servicio de la barra, para poder disfrutar del partido
entre el Atlético de Madrid C. F. y el Real Madrid C.F. finalizando el mismo
con un resultado de 4 – 0.
"Cal y Canto" pusieron la nota
musical durante el largo matiné que duró hasta la noche manteniendo el ambiente
festivo en Alcornocal hasta la noche.
Manuel Moreno, presidente de la Asociación de
Vecinos de Alcornocal "La Columna" se sintió muy agradecido a todos
los que han hecho posible una edición de la matanza cuajada de actividades que
resurge tras un año sin celebrarse con más fuerza que nunca y con ganas de
superación en ediciones futuras.
Francisco Javier Cabezas
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